El 10 de Abril un grupo de 5 ladrones armados irrumpieron en la casa de un pueblerino en Córdoba, para robar objetos de valor y dinero. Alejandro y su esposa estaban en la cama mientras dormían.
Los ladrones tenían ya en su poder una cantidad modesta de dinero cuando Alejandro agarró un sable japonés conocido como ¨katana¨ que tenía de decoracion en una pared, los enfrentó e hirió en los brazos. Los ladrones escaparon en un auto Peugeot 206 que estaba estacionado frente a la casa con un cómplice al volante.
El 22 de mayo la fiscal Jorgelina Gutiez dictó el sobreseimiento de Alejandro al considerar que actuó en legítima defensa. La funcionaria judicial también ratificó la prisión preventiva de las cinco personas que fueron detenidas acusadas de participar en el hecho.
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